La convocatoria oficial para el encuentro en el Pascual Guerrero confirmó dos ausencias sensibles para el esquema escarlata. Dylan Borrero, uno de los jugadores más desequilibrantes en ataque, no logró recuperarse a tiempo de la lesión sufrida el 6 de agosto en un partido de Copa BetPlay ante Tigres. A él se sumó el experimentado Éder Álvarez Balanta, cuya ausencia dejó un vacío en la estructura táctica del equipo, tanto en defensa como en el mediocampo.
Sin embargo, no todas fueron malas noticias para el cuerpo técnico.
La convocatoria presentó como principales novedades los regresos de Jhon Murillo y Mateo Castillo, quienes superaron sus respectivos trabajos de reacondicionamiento y estuvieron disponibles. La inclusión de Murillo, un extremo con capacidad de desequilibrio, y de Castillo, una opción para fortalecer la recuperación en el mediocampo, ofreció variantes a Raimondi. Adicionalmente, se mencionó que el arquero Luis David Quintero, lesionado desde noviembre, ya se encuentra en proceso de readaptación física, aunque todavía no está disponible para competir. Esta mezcla de bajas y altas refleja los desafíos que enfrenta el América en un calendario apretado, donde la gestión de la plantilla es crucial para competir en frentes simultáneos como la Liga BetPlay y la Copa Sudamericana.