Muchos agricultores se han visto obligados a abandonar sus cultivos por miedo.

Más allá de Palestina, el conflicto influye en la política interna de otros países. En Irak, las elecciones legislativas se desarrollan bajo la sombra de la guerra. La "onda expansiva" de los ataques de Hamás y la respuesta israelí se ha convertido en un factor que moldea el debate político y las alianzas en un país que debe lidiar con su compleja relación con Irán y Estados Unidos. Estos ejemplos demuestran que el conflicto de Gaza actúa como un catalizador, intensificando disputas existentes y reconfigurando el tablero geopolítico regional, con consecuencias que se extienden mucho más allá del campo de batalla inmediato.