Esta visión es compartida por figuras del sector financiero tradicional, como el banquero Rodolfo Gasparri, quien considera "indispensable incorporar el modelo de las criptomonedas a la banca venezolana". De hecho, se proyecta que la integración de USDT en el sistema bancario formal podría ocurrir tan pronto como en diciembre, impulsada por la escasez de dólares en efectivo, según Richard Ujueta, presidente de la Cámara Venezolana de Comercio Electrónico (Cavecom-e). La dependencia de las 'stablecoins' podría intensificarse si la administración Trump aumenta la presión económica sobre el gobierno de Maduro, lo que desestabilizaría aún más la frágil economía del país. En este contexto, las 'stablecoins' no solo funcionan como una reserva de valor, sino también como un medio de intercambio que permite a los venezolanos eludir las restricciones del sistema financiero tradicional y participar en la economía digital global.