Varios indicadores apuntan a esta creciente adopción.

El REX-Osprey XRP ETF ha superado los 100 millones de dólares en activos, una señal clara del fuerte interés de los inversores institucionales en obtener exposición regulada a XRP. Además, el mercado de derivados ha mostrado una actividad sin precedentes, con los futuros de XRP impulsando un volumen de 26.900 millones de dólares en la plataforma CME, lo que indica una demanda récord. Ripple ha fortalecido su ecosistema con la adquisición de Hidden Road para formar Ripple Prime, una medida que posiciona a XRP y a su futura stablecoin, RLUSD, en el centro de las finanzas globales al conectar los mercados a través de servicios de prime brokerage. El CEO de Ripple, Brad Garlinghouse, ha reafirmado que "XRP es central para todo lo que Ripple hace", aconsejando a los inversores "mantener sus posiciones". Esta visión unificada de los ejecutivos de Ripple, combinada con el éxito de los productos de inversión, está alimentando un renovado impulso alcista, con analistas apuntando a una posible ruptura del precio hacia los 3,45 dólares.