Esta colaboración surge en un momento en que Wall Street está intensificando su apuesta por las criptomonedas. JPMorgan, por ejemplo, confirmó a través de su ejecutivo Scott Lucas que está desarrollando servicios de trading de criptomonedas para sus clientes, aunque la firma aún duda en gestionar la custodia directamente. Por su parte, Citigroup ha invertido en BVNK, una empresa de stablecoins con sede en Londres. Morgan Stanley también ha dado un paso importante al abrir el acceso a inversiones en criptomonedas a todos sus clientes, comenzando con fondos de Bitcoin de BlackRock y Fidelity.

Esta convergencia entre las finanzas tradicionales y las descentralizadas (DeFi) es vista como una evolución necesaria.

Un artículo señala que, para liberar el potencial masivo de las criptomonedas, "DeFi y TradFi deben dejar de lado sus diferencias" y unirse a través de soluciones de pago híbridas.