Compañías como Nakamoto Holdings continúan fortaleciendo sus posiciones en Bitcoin, con adquisiciones recientes que elevan su tesorería a 5.765 BTC.
Sin embargo, otras empresas están mirando hacia activos con diferentes propuestas de valor. Por ejemplo, SharpLink Gaming, la segunda tesorería corporativa más grande de Ether, aprobó una recompra de acciones por 1.500 millones de dólares para aumentar sus tenencias de ETH, demostrando una fuerte convicción en el potencial del ecosistema de Ethereum. De manera similar, VERB Technology Company, que reportó más de 780 millones de dólares en activos, destacó la inclusión de Toncoin en su estrategia de tesorería, apostando por el crecimiento de la red asociada a Telegram.
Esta diversificación indica que las corporaciones ya no ven a Bitcoin como la única opción viable.
En cambio, están evaluando los méritos de diferentes plataformas blockchain, ya sea por su capacidad para contratos inteligentes (Ethereum) o su potencial de adopción masiva (Toncoin). No obstante, algunos analistas advierten que, en ciertos casos, empresas en dificultades podrían estar utilizando estos anuncios como una táctica de relaciones públicas para generar un interés a corto plazo en sus acciones, en lugar de una estrategia financiera a largo plazo.