Marín Silva es requerido por una corte de Estados Unidos por delitos relacionados con narcotráfico y concierto para delinquir. A pesar de estar detenido desde 2015 y cumplir una condena de 30 años en Colombia por homicidio, secuestro y extorsión, entre otros delitos, ha seguido delinquiendo desde la cárcel. Su organización, 'La Inmaculada', es considerada la más grande del Valle y ha sido responsable de olas de violencia, asesinatos de políticos y dragoneantes del Inpec, y extorsiones para presionar al Gobierno a iniciar una negociación. Tras conocerse la decisión de la Corte, 'Pipe Tuluá' emitió un comunicado pidiendo a los miembros de su grupo abstenerse de “cualquier tipo de acción violenta”, mientras reiteraba su rechazo a los cargos de narcotráfico y su solicitud para ser gestor de paz. Las autoridades de Tuluá y la Gobernación del Valle anunciaron un refuerzo en la seguridad del municipio para prevenir alteraciones del orden público, recordando la violencia desatada en ocasiones anteriores tras noticias sobre su situación judicial.