En uno de los actos violentos, presuntos miembros del ELN atacaron con “tatucos” el Batallón Energético y Vial N.° 14 en Fortul y perpetraron otro atentado contra un tramo del Oleoducto Caño Limón-Coveñas en Arauquita, lo que obligó a Ecopetrol a activar su plan de emergencia. Adicionalmente, un vehículo militar fue atacado con al menos diez disparos en Arauquita, dejando un suboficial y tres soldados heridos. En contraste con esta ofensiva, el Frente de Guerra Oriental del ELN liberó a cinco soldados profesionales que habían sido secuestrados el 9 de noviembre en Tame mientras se movilizaban de civil en un bus de servicio público.
Los militares, identificados como Leider Navarro, Sergio Muñoz, Daniel Montive, José Moreno y Edgar Muñoz, fueron entregados a una comisión humanitaria conformada por la Defensoría del Pueblo y la Iglesia Católica.
El grupo guerrillero afirmó en un comunicado que los entregaba “sanos y salvos”. Estos hechos ocurrieron en el contexto de un bombardeo ordenado por el presidente Petro en Puerto Rondón, Arauca, contra las disidencias de 'Iván Mordisco', donde también murió una menor de edad.












