La Fiscalía sostiene que existió un “acuerdo criminal” entre ambos para atacar a la víctima. La defensa de los acusados ha argumentado que la agresión fue una reacción a un supuesto intento de abuso por parte de Moreno hacia una amiga, versión que la Fiscalía y allegados de la víctima han cuestionado.

Videos de seguridad del interior del bar no muestran ningún altercado previo.

La investigación también se centra en el papel de Kleidymar Fernández Sulbarán, la mujer disfrazada de azul, quien presuntamente habría incitado a los agresores. El abogado de la familia Moreno, Francisco Bernate, ha solicitado su captura, afirmando que “es evidente su participación”. El padre de la víctima, Jaime Alberto Moreno, expresó su dolor y desconcierto: “Cuando uno ve la cara de satisfacción de haber matar a alguien (...) uno siente que la vida se le va”.