La operación resultó en la captura de cinco ciudadanos colombianos, incluyendo a los presuntos cabecillas, los hermanos Pablo Felipe y Santiago Prada Moriones, conocidos como alias “Black Jack” y “Marco”, quienes fueron detenidos en Madrid e Ibiza.

La investigación, que se extendió por varios años, reveló un sofisticado esquema criminal que blanqueó más de 182.000 millones de pesos. La organización obtenía sus ganancias del narcotráfico, contaminando contenedores con cocaína que salían desde puertos de Colombia y Ecuador hacia Europa.

Inicialmente, utilizaban el método ‘Hawala’ para mover el dinero en efectivo, pero desde 2020 migraron hacia el uso de criptomonedas y activos virtuales para aprovechar el seudoanonimato. Para ello, constituyeron empresas de activos virtuales en países como España, Lituania, Estados Unidos y Colombia. En Colombia, fueron capturados Jimmy García Solarte, alias “El Transportador”, en Pereira, y Brenda Yineth Pineda Bedoya, alias “La Contadora”, en Medellín. Como parte del golpe financiero, las autoridades iniciaron medidas cautelares sobre 49 bienes, incluyendo 25 inmuebles, 9 empresas y 15 vehículos, valorados en cerca de 53 mil millones de pesos, ubicados en Risaralda, Antioquia, Bolívar y Bogotá. Los capturados en España están a la espera de su extradición, mientras que los detenidos en Colombia enfrentan cargos por lavado de activos y concierto para delinquir.