La acción representa un golpe significativo a la estructura criminal liderada por alias ‘Calarcá’. Los neutralizados fueron identificados como alias ‘Román’, cabecilla de la comisión, y alias ‘Guillermino’ o ‘Zarco’, principal explosivista del Frente 36 y presunto autor intelectual del campo minado que afectó la aeronave.

El presidente Gustavo Petro confirmó la operación a través de sus redes sociales, declarando: “mataron a nuestros 13 policías, los perseguimos, los encontramos y cayeron en combate”. El mandatario añadió que los abatidos eran “los mandos de la comisión que mató a los 13 jóvenes de la policía con cargas explosivas”. Por su parte, el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, había anunciado previamente una recompensa de hasta 200 millones de pesos por información sobre alias ‘Guillermino’. El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, atribuyó un posterior atentado con explosivos contra una torre de energía en la ciudad a una retaliación por este operativo, y anunció que solicitará a Estados Unidos la extradición de los responsables del ataque al helicóptero, argumentando que la aeronave era de fabricación estadounidense.