La justicia colombiana ha otorgado principios de oportunidad a Olmedo López, exdirector de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), y a Sneyder Pinilla, exsubdirector de la misma entidad. Esta figura jurídica los convierte en testigos cruciales para la Fiscalía en el macrocaso de corrupción que investiga el desvío de miles de millones de pesos destinados a la atención de emergencias. La decisión, avalada por un juez de control de garantías de Bogotá, suspende parcialmente la acción penal contra López por los delitos de interés indebido en la celebración de contratos y falsedad en documento público, aunque deberá seguir respondiendo por concierto para delinquir agravado y peculado por apropiación. Como parte del acuerdo, López se comprometió a testificar contra al menos 27 personas, entre congresistas y altos funcionarios, además de devolver 724 millones de pesos y pedir perdón públicamente.
Su abogado, José Luis Moreno, calificó la decisión como un “paso histórico en la lucha contra la corrupción”. De manera similar, Pinilla ha comenzado a rendir declaración ante la Corte Suprema de Justicia, donde ya ha implicado a congresistas como el senador Julio Elías Chagüi del Partido de la U, a quien señaló de gestionar un contrato de más de 22.000 millones de pesos para obras en Sahagún, Córdoba. Las declaraciones de ambos exdirectivos son consideradas fundamentales para desentrañar la red de corrupción, que según las investigaciones, involucró la compra de carrotanques con sobrecostos y el direccionamiento de contratos para favorecer a políticos a cambio de apoyo a las reformas del gobierno.
En resumenLa aprobación de principios de oportunidad para Olmedo López y Sneyder Pinilla marca un punto de inflexión en el escándalo de la UNGRD. Su colaboración como testigos de la Fiscalía es fundamental para identificar y procesar a una red de altos funcionarios y congresistas implicados en el desvío de recursos públicos.