El alcalde del municipio, Diego Andrés López, aclaró que no se trataba de turistas, sino de residentes. La principal hipótesis de la Policía de Cundinamarca es una “vendetta” o ajuste de cuentas entre bandas delictivas con origen en Bogotá, descartando la participación de grupos armados ilegales. Esta teoría se sustenta en que las víctimas tenían antecedentes judiciales por delitos como concierto para delinquir, porte ilegal de armas, hurto calificado, tráfico de estupefacientes e incluso homicidio. Se menciona que Chivata Daza y Morales Lara estarían vinculados a una banda conocida como ‘Los Avatars’, dedicada a robos en zonas rurales, y que Chivata también habría pertenecido a una red de hurto de carros de valores implicada en el asesinato de un policía en Bogotá.