Esta aspiración representa la última oportunidad del club para salvar el año con una participación internacional. Tras un 2025 calificado como un “semestre para el olvido”, que incluyó una eliminación en la primera ronda de la Copa Sudamericana de ese año y el fracaso en clasificar a los cuadrangulares de la Liga BetPlay II-2025, el equipo bogotano ha puesto sus esperanzas en la tabla de reclasificación anual. Su victoria por 2-1 ante Boyacá Chicó en la última fecha del torneo local fue crucial, permitiéndole alcanzar un total de 73 puntos en esta tabla acumulada.
Dicho puntaje posiciona al conjunto ‘Embajador’ con altas probabilidades de obtener uno de los cupos que Colombia otorga para la Copa Sudamericana. La dirigencia y el cuerpo técnico, encabezado por Hernán Torres, ya trabajan en la reestructuración del plantel para 2026, lo que incluye la posible salida de jugadores extranjeros de bajo rendimiento. La clasificación al torneo continental es vista como un paso fundamental para revitalizar el proyecto deportivo, ofrecer una vitrina internacional y calmar el descontento de su afición después de una campaña decepcionante. La posible participación en la Sudamericana se convierte así en un objetivo prioritario para dar un cierre digno a un año lleno de dificultades y comenzar el 2026 con renovadas ambiciones.













