Esta eliminación es mencionada en los artículos como uno de los fracasos de un semestre que se describe como "para el olvido". La primera fase de la Copa Sudamericana enfrenta a equipos del mismo país para definir quiénes avanzan a la fase de grupos, lo que significa que la derrota de Millonarios no solo fue un golpe deportivo, sino también un revés en la rivalidad nacional. Quedar fuera del torneo en esta instancia inicial impidió que el club bogotano compitiera a nivel internacional contra equipos de otros países y accediera a los importantes premios económicos que ofrece la Conmebol en las etapas posteriores. Este mal resultado en la Sudamericana se suma a una campaña irregular en la Liga BetPlay y a una eliminación en octavos de final de la Copa BetPlay, conformando un panorama general de bajo rendimiento para uno de los clubes más grandes de Colombia.
La pronta despedida del certamen continental subraya las dificultades que ha enfrentado el equipo para ser protagonista en el ámbito internacional recientemente.









