Liga de Quito, tras eliminar a São Paulo, y de Independiente del Valle, que superó a Once Caldas, confirmaron el excelente momento que viven los clubes de ese país en el escenario continental. Este hito marca un cambio de poder en la zona norte de Sudamérica, donde históricamente los clubes colombianos habían sido los principales exponentes.

Mientras Ecuador celebra su éxito, el fútbol colombiano enfrenta una realidad preocupante, con siete años sin llegar a instancias finales de torneos CONMEBOL.

La eliminación de Once Caldas a manos de Independiente del Valle fue un claro reflejo de esta tendencia. Desde que la CONMEBOL cambió el formato de sus torneos en 2017, los equipos ecuatorianos han mostrado un crecimiento sostenido. Independiente del Valle ha sido un protagonista constante, ganando la Copa Sudamericana en 2019 y 2022, mientras que Barcelona SC llegó a semifinales de la Libertadores en 2017 y 2021. Liga de Quito, por su parte, se coronó en la Sudamericana 2023 y ahora busca la gloria en la Libertadores.

En contraste, los equipos colombianos han tenido un desempeño discreto. En la Libertadores, no han superado los octavos de final con regularidad, y en la Sudamericana, solo Junior de Barranquilla alcanzó una final en 2018. Este dominio ecuatoriano evidencia un proyecto deportivo exitoso, basado en la formación de talentos y una gestión sólida, que hoy cosecha sus frutos a nivel internacional.