Esta inyección económica es especialmente relevante al compararla con los premios del torneo local.

Mientras el campeón de la Liga BetPlay recibe 500.000 dólares, Once Caldas ya ha superado con creces esa cifra solo por su desempeño continental. Esta disparidad resalta la importancia para los equipos colombianos de priorizar las competencias internacionales, ya que el verdadero botín financiero se encuentra en la aventura continental, un factor que puede marcar la diferencia en la planificación y competitividad a largo plazo.