Un lamentable episodio de violencia empañó los octavos de final de la Copa Sudamericana, obligando a la cancelación del partido de vuelta entre Independiente de Avellaneda y Universidad de Chile en el Estadio Libertadores de América. Los graves enfrentamientos entre las hinchadas de ambos equipos, que incluyeron agresiones físicas y el lanzamiento de objetos, llevaron a la CONMEBOL a suspender el encuentro cuando se jugaban los primeros minutos del segundo tiempo. Los desmanes, que según reportes comenzaron en la tribuna visitante, escalaron a una batalla campal que dejó un saldo de más de 100 detenidos y 19 personas hospitalizadas, algunas de ellas en estado grave. Las imágenes de la violencia se viralizaron rápidamente, mostrando la falta de un operativo de seguridad adecuado para un partido de esta magnitud. La CONMEBOL emitió un comunicado oficial rechazando los actos violentos y confirmando que el partido quedaba cancelado.
La entidad anunció que su Unidad Disciplinaria está recopilando datos para aplicar las sanciones correspondientes.
La situación ha generado una gran incertidumbre sobre el desenlace de la llave. Entre los posibles escenarios que se manejan, y según medios como TyC Sports, la CONMEBOL podría tomar la drástica decisión de descalificar a ambos clubes de la competencia. Esta medida tendría un impacto directo en el cuadro de cuartos de final, ya que Alianza Lima, que esperaba al ganador de esta serie, podría clasificar directamente a las semifinales sin jugar. La decisión final está en manos del tribunal disciplinario, que deberá actuar con firmeza para sentar un precedente contra la violencia en el fútbol sudamericano.
En resumenEl partido de vuelta de octavos de final de la Copa Sudamericana entre Independiente y Universidad de Chile fue cancelado debido a una batalla campal entre hinchadas. El incidente dejó más de 100 detenidos y 19 heridos. La CONMEBOL investiga los hechos y podría descalificar a ambos equipos, lo que clasificaría directamente a Alianza Lima a semifinales.