La decisión ha provocado una fuerte reacción negativa, especialmente entre los aficionados ecuatorianos, quienes recuerdan antecedentes polémicos del juez.

La designación de Roldán para un partido tan decisivo, donde Liga de Quito defenderá una ventaja de 3-0 en Brasil, ha eclipsado el interés deportivo. Los hinchas ecuatorianos expresaron su malestar en redes sociales, manifestando su temor a un "atraco histórico" y cuestionando la elección de un árbitro con un historial controvertido para el fútbol de su país. Las críticas se basan en episodios recientes, como la polémica expulsión de Moisés Caicedo en un partido de eliminatorias contra Argentina, y un recordado encuentro entre Ecuador y Brasil donde Roldán expulsó dos veces al arquero Alisson, para luego retractarse en ambas ocasiones tras la intervención del VAR.

Estos antecedentes han consolidado una percepción de que las decisiones del árbitro colombiano han sido perjudiciales para los equipos ecuatorianos. A pesar de la cómoda ventaja de LDU, la presencia de Roldán, quien estará acompañado por un cuerpo arbitral completamente colombiano, ha añadido un elemento de tensión y desconfianza de cara al crucial partido de vuelta en São Paulo.