En contraste, los clubes ecuatorianos han sido protagonistas constantes.

Independiente del Valle ha ganado dos títulos de Copa Sudamericana (2019 y 2022) y fue finalista de la Libertadores en 2016, mientras que Barcelona SC alcanzó las semifinales de la Libertadores en 2017 y 2021. La clasificación de LDU Quito a semifinales este año, eliminando a un gigante como São Paulo, no hace más que confirmar esta tendencia.

El éxito ecuatoriano se atribuye a procesos sólidos y una clara apuesta por el talento joven, mientras que en Colombia se debate sobre las causas de una crisis que ya se extiende por casi una década sin llegar a finales continentales.