La queja más vehemente se centró en la "absurda expulsión del jugador Gonzalo Plata", a quien se le mostró una segunda amarilla en una jugada en la que, según el club, él fue quien recibió la falta. Flamengo también criticó la "omisión del videoárbitro Nicolás Gallo" en momentos clave del partido. La directiva del club confirmó que apelará la sanción de Plata con la "absoluta certeza" de que la CONMEBOL revertirá el castigo, y calificó el incidente como un "ataque directo a la integridad del torneo".