Edwin Cardona se convirtió en el protagonista negativo del empate sin goles entre Atlético Nacional y São Paulo, al desperdiciar dos cobros desde el punto penal. Este hecho marcó un hito negativo en la historia del club, ya que es el primer jugador de Nacional en fallar dos penales en un mismo partido de Copa Libertadores. La primera oportunidad para el equipo colombiano llegó al minuto 11, tras una mano en el área de Nahuel Ferraresi. Cardona, especialista en cobros de pelota quieta, asumió la responsabilidad, pero su remate se fue desviado por el costado derecho del arco. A pesar del error, el volante tuvo una segunda oportunidad en el minuto 67, luego de una falta sobre Alfredo Morelos. Nuevamente, Cardona se paró frente al balón, pero esta vez el arquero de São Paulo, Rafael, adivinó la intención y atajó el disparo. Tras el partido, el arquero brasileño reveló que había estudiado al colombiano y que incluso le habló antes de los cobros: "Ya había hablado con él y le dije que esperaría en el primer penalti. También esperé un poco en el segundo [...] pero tuve la suerte de atajarlo".
La frustración fue evidente en Cardona, quien salió del campo entre lágrimas.
En la zona mixta, asumió su responsabilidad: "Nunca va a ser fácil cuando te toca errar, es de hombres asumirlo.
[...] Pedirles disculpas al equipo y a la hinchada, pero así es el fútbol".
A pesar de las críticas, también defendió su decisión de cobrar el segundo penal, afirmando que "pocos tienen el carácter de hacer lo que hice". El técnico Javier Gandolfi respaldó a su jugador, recordando el caso de Martín Palermo, quien falló tres penales en un partido.
"Estamos para arroparlo, tantas alegrías no nos podemos quedar con una sola negativa", declaró Gandolfi.
Sin embargo, analistas como Carlos Antonio Vélez fueron contundentes, calificando los fallos como producto de un exceso de confianza y señalando que Cardona desperdició las oportunidades "por sobrado".
En resumenEdwin Cardona tuvo una noche para el olvido al fallar dos penales en el empate de Atlético Nacional contra São Paulo. Este hecho, sin precedentes para un jugador del club en Libertadores, fue clave en el resultado y generó una ola de críticas, aunque el jugador asumió la responsabilidad y recibió el respaldo de su técnico.