La cadena hotelera afirma que su objetivo es que cada plato transmita "que la sostenibilidad puede ser deliciosa, inclusiva y responsable". La decisión de implementar este menú responde a tres motivaciones principales: la mitigación climática, reconociendo el impacto ambiental de la producción de proteína animal; la creciente demanda de los huéspedes, ya que el mercado de opciones vegetales ha crecido un 40% en los últimos años; y el deseo de inspirar un cambio positivo, demostrando que el disfrute gastronómico y el cuidado del planeta no son excluyentes. Pilar Morales, directora de Sostenibilidad del Grupo, destaca los beneficios para el huésped, incluyendo salud y bienestar, inclusividad para dietas diversas y una conexión cultural al revalorizar ingredientes locales como la quinua y los fríjoles. Por su parte, Paula Morales, directora de mercadeo, señala que la iniciativa consolida a la cadena como "pionera en sostenibilidad en Colombia", impulsa la innovación gastronómica y genera un impacto medible en la reducción de la huella de carbono. Este movimiento estratégico posiciona a Germán Morales Hoteles a la vanguardia de una nueva era en la hospitalidad, donde el bienestar del cliente y el del planeta comparten la misma mesa.