Las pastas largas como el espagueti son las favoritas, y preparaciones como la carbonara y la boloñesa lideran los pedidos.

Mónica Llanos, de il forno, asegura que la versatilidad de la pasta es clave en su popularidad, ya que “basta tan sólo con un juego de salsas para lograr platos diferentes y deliciosos”. Un dato cultural interesante es la preferencia en la región Caribe por una cocción más prolongada, que deja la pasta “muy gordita y suave”, en contraste con el tradicional punto ‘al dente’.

Esto demuestra cómo un producto global se resignifica según los gustos locales.

La celebración, instaurada en 1995 en Roma, busca promover el valor nutricional y cultural de la pasta, un objetivo que en Colombia se refleja en su presencia constante en los hogares y en la creciente sofisticación de su consumo.