Liceth Rubiano, una de las hijas del propietario Héctor Rubiano, convocó a la ciudadanía a realizar plantones pacíficos frente a la vivienda. La respuesta fue inmediata y contundente.

Durante el puente festivo, decenas de vecinos y ciudadanos se congregaron en el lugar, protestando de manera continua para exigir la devolución de la casa. La presión colectiva, documentada en transmisiones en vivo en redes sociales como TikTok, finalmente surtió efecto y la pareja de arrendatarios abandonó el inmueble.

El periodista Juan Carlos Villani, quien investigó el caso, afirmó: “Héctor recuperó su casa gracias a la unión ciudadana”.

Un video posterior mostró la emotiva reacción de don Héctor Rubiano al regresar a su hogar, conmovido hasta las lágrimas, una imagen que se viralizó como símbolo de resistencia comunitaria.