El proceso fue un desafío técnico para el equipo de biólogos y veterinarios; la incubación duró 62 días y la eclosión se prolongó por 66 horas, requiriendo una asistencia final de 18 minutos para completarse con éxito. La cría pesó 203 gramos al nacer y, para evitar la impronta humana, será alimentada mediante títeres. Este logro confirma la eficacia de los protocolos de manejo reproductivo y renueva las esperanzas para la recuperación de la población nacional de cóndores, estimada en solo unos 150 ejemplares en libertad. El cóndor andino, ave nacional de Colombia, enfrenta graves amenazas como la pérdida de hábitat y el envenenamiento. La fundación agradeció el apoyo de sus aliados e invitó al público a sumarse a la causa para proteger el patrimonio natural del país.