Una vez rescatados, los menores fueron evaluados para verificar su estado de salud y garantizar su integridad física y emocional. Posteriormente, fueron trasladados a una sede del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), donde se inició el proceso para el restablecimiento de sus derechos. Las autoridades buscan a los padres o cuidadores de los niños para que respondan por la situación de abandono. En videos del rescate, se observa cómo los pequeños abrazan a los policías que los auxiliaron, en una muestra de gratitud y alivio.