Ha beneficiado a cerca de 3.000 pescadores y sus familias en ocho municipios, mejorando sus ingresos hasta en un 60%.

El director de la CRA, Jesús León Insignares, expresó que el reconocimiento premia la dedicación de las comunidades de pescadores. El plan incluye el repoblamiento de aguas con alevinos de bocachico, educación ambiental para los pescadores sobre ciclos reproductivos, y el reemplazo de artes de pesca inadecuadas por herramientas selectivas.

La FAO valoró la capacidad del programa para combinar restauración ambiental, inclusión social y gobernanza participativa, destacándolo como una práctica replicable para la región Caribe.