El logro de Samuel ha sido ampliamente celebrado por autoridades y la comunidad educativa. El gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey, fue uno de los primeros en felicitarlo, señalando que su éxito "no es fruto del azar, sino el reflejo de un modelo pedagógico exitoso, el esfuerzo familiar y el acompañamiento docente". Sus profesores lo describen como un estudiante disciplinado, curioso y trabajador, cualidades que lo llevaron a destacarse a pesar de las limitaciones de recursos que a menudo enfrentan los entornos rurales.

Este hito demuestra que la calidad educativa y el talento pueden florecer en cualquier rincón del país, independientemente del contexto.

El puntaje perfecto le abre a Samuel Huertas un amplio abanico de oportunidades para su futuro, permitiéndole aspirar a becas y programas de excelencia académica en las universidades más prestigiosas de Colombia, tanto públicas como privadas. Su historia se convierte en un poderoso recordatorio y una fuente de inspiración, demostrando que la dedicación y el apoyo adecuado son capaces de superar barreras y alcanzar la excelencia, sirviendo como un referente para miles de jóvenes en situaciones similares.