La operación logística requirió una coordinación interinstitucional entre la Armada Nacional, DIMAR, ANI, DIAN, Migración Colombia y el ICA, entre otras entidades. Esta intervención responde a las dificultades logísticas que enfrenta la distribución terrestre desde el Valle del Cauca, la cual ha ralentizado la llegada de combustible a las estaciones de servicio y ha generado desabastecimiento. Con estos envíos, el Gobierno asegura que Nariño contará con los energéticos necesarios para su desarrollo económico y social, aliviando una coyuntura que ha afectado a miles de ciudadanos y diversos sectores productivos de la región.