Esta iniciativa representa una apuesta por la paz y el desarrollo económico en territorios históricamente afectados por el conflicto armado y las economías ilegales. La directora de la entidad, Gloria Miranda, destacó el simbolismo de la llegada del programa a una zona donde la violencia lo habría hecho imposible hace un año. “Hoy la paz avanza y llegamos a entregar insumos y herramientas para que 3.000 familias transiten de la coca al cacao”, afirmó durante la primera entrega de 356 kits agropecuarios.
El programa ofrece un apoyo integral que va más allá de lo económico. Cada familia beneficiaria recibe un incentivo de 12 millones de pesos, entregado en seis pagos condicionados a la erradicación total de los cultivos de uso ilícito.
Adicionalmente, se proporcionan kits con insumos y herramientas para fortalecer sistemas agroforestales que combinan cacao con productos como plátano, ají, vainilla y especies forestales nativas.
Este enfoque no solo busca generar ingresos estables, sino también promover la seguridad alimentaria y la conservación de la biodiversidad. El programa también contempla el apoyo con maquinaria amarilla para el mejoramiento de vías y la articulación con los sectores de educación, salud y vivienda, buscando una transformación social completa. La implementación en Roberto Payán, realizada con el acompañamiento de los consejos comunitarios locales, demuestra el compromiso del Gobierno Nacional por construir un desarrollo rural integral que ofrezca alternativas reales y sostenibles a las comunidades.











