El hallazgo, que sorprendió a expertos que no creían que la especie habitara en este territorio, fue posible gracias al monitoreo con cámaras trampa. El avistamiento tuvo lugar en el corregimiento de El Manzanillo, en un área protegida de 316 hectáreas donde hay instaladas 15 cámaras trampa.

Esta zona forma parte del distrito de manejo integrado del Valle de Aburrá - Río Cauca. El alcalde de Itagüí, Diego Torres, celebró el suceso como una prueba del éxito de las políticas ambientales del municipio: “La presencia del puma en nuestra ciudad es una muestra contundente del buen estado de conservación de nuestras zonas protegidas. Su presencia, junto con la de otros felinos como el ocelote, el jaguarundi y el tigrillo, demuestra que en Itagüí hay una gran riqueza de fauna y flora”. Además del puma, en este lugar se han registrado más de 135 especies de aves y 49 de mamíferos. El programa de guardabosques, que cuenta con 12 funcionarios, ha sido clave para la protección de la fauna y flora, evitando la invasión de los terrenos. Diego Duque, uno de los guardabosques, señaló que “felinos como el puma son esquivos, de hábitos nocturnos, evitan las poblaciones, esto facilita su avistamiento” a través de esta tecnología.