Sin embargo, otras voces mantienen una perspectiva alcista a largo plazo.

El veterano comerciante Peter Brandt reafirmó su proyección de que Bitcoin podría alcanzar los 200.000 dólares, aunque moderó las expectativas de tiempo, situando este hito no antes del tercer trimestre de 2029.

Según Brandt, la reciente caída es una señal positiva para el activo a largo plazo.

Otros analistas, como Juan Rodríguez, descartan que haya comenzado un mercado bajista, argumentando que datos on-chain sugieren un rebote inminente y que "el ciclo alcista de bitcoin no ha terminado, ha cambiado". Esta división de opiniones refleja la incertidumbre del momento, con algunos vendiendo por pánico mientras otros buscan comprar en el retroceso, viendo la zona de 80.000 dólares como un nuevo nivel de soporte.