Sin embargo, el panorama a largo plazo es más sombrío.
Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, advirtió sobre una tendencia decreciente en la capitalización bursátil del país, que pasó de representar el 72,7 % del PIB en 2010 a solo el 17,4 % el año pasado.
Esta "diferencia estructural" limita las opciones de financiamiento para las empresas y de inversión para los ahorradores.
El superintendente financiero, César Ferrari, coincidió al señalar la poca liquidez del sistema, lo que resulta en mercados "poco profundos, costosos y poco inclusivos".
Según Mejía, el avance en la implementación de las recomendaciones de la misión de mercado de capitales de 2019 ha sido "bastante preocupante", con solo un 13 % de las sugerencias implementadas hasta 2023, lo que subraya la urgencia de acelerar las reformas para fortalecer el mercado.











