Como resultado, las principales referencias de crudo se valorizaron.

El Brent, de referencia en Europa, subió un 1,67 %, situando el barril en US$65,58, mientras que el West Texas Intermediate (WTI), de referencia en Estados Unidos, avanzó un 1,77 % hasta los US$61,96. La decisión de la OPEP+ de deshacer gradualmente los recortes récord implementados durante la pandemia ha sido un factor clave para la estabilización de los precios. Para Colombia, la evolución de los precios del petróleo es un factor crucial, dado su impacto directo sobre la balanza comercial y los flujos de divisas hacia el país.