Activos de baja capitalización como CAKE, ETHFI y ASTER registraron ganancias de hasta un 255 %, demostrando el alto apetito por el riesgo de los inversores en un entorno optimista. Otras criptomonedas de gran capitalización también tuvieron un desempeño destacado.

BNB, por ejemplo, estableció un nuevo máximo histórico por encima de los US$1.111. Ether (ETH) registró una ganancia semanal del 17 %, con analistas evaluando la posibilidad de que supere los US$5.000 si continúa la entrada de capital institucional. XRP recuperó el nivel de los US$3, lo que, según algunos análisis técnicos, abre la puerta a una posible subida del 40 % en octubre.

Solana (SOL) también captó la atención institucional, con flujos hacia sus ETP superando los US$500 millones.

Este comportamiento generalizado del mercado subraya cómo el liderazgo de Bitcoin suele marcar la pauta para el resto de los activos digitales, que se benefician del sentimiento positivo y la liquidez que atrae la criptomoneda dominante.