Los fondos cotizados en bolsa (ETFs) de criptomonedas están experimentando un notable resurgimiento, atrayendo un flujo significativo de capital institucional y señalando una creciente confianza en el sector. Los ETFs de Bitcoin y Ether lideraron esta recuperación, con entradas combinadas que superaron los 557 millones de dólares, coincidiendo con un momento de incertidumbre en los mercados tradicionales. Los ETFs de Bitcoin captaron la mayor parte del capital, con 430 millones de dólares, mientras que los de Ether atrajeron 127 millones. Este renovado interés institucional es un factor clave que, según analistas, podría impulsar los precios de los criptoactivos a nuevos máximos. Un ejemplo destacado de este auge es el fondo IBIT gestionado por BlackRock, que alcanzó la cifra de 90.000 dólares en activos bajo gestión, posicionándose entre los 20 principales ETFs de Wall Street.
El optimismo del mercado también se ve alimentado por el entorno regulatorio en Estados Unidos.
Un analista ha aumentado las probabilidades de aprobación de nuevos ETFs de criptomonedas al 100 %, citando un "radical reinicio de listados" por parte de la SEC. Esta renovada demanda institucional es considerada un pilar fundamental para el futuro del mercado, como lo demuestra el hecho de que Bitcoin captó 8.000 millones de dólares de Wall Street en el tercer trimestre a través de productos de inversión al contado. Además, empresas como CoinShares están buscando capitalizar esta tendencia mediante la adquisición de gestoras de activos como Bastion Asset Management para lanzar ETFs de criptomonedas gestionados activamente en EE.
UU.
En resumenLa fuerte afluencia de capital hacia los ETFs de Bitcoin y Ether, liderada por gigantes como BlackRock, y un panorama regulatorio cada vez más favorable, subrayan la consolidación de las criptomonedas como una clase de activo legítima para los inversores institucionales, sentando las bases para un crecimiento sostenido.