La situación ha provocado reacciones mixtas en las bolsas globales, que operan con cautela.

El dólar, por su parte, ha mostrado un “sesgo bajista”, presionado por la incertidumbre política, un comportamiento que, según analistas, “podría favorecer el desempeño del peso colombiano”. Los legisladores enfrentan un plazo inminente para aprobar una ley de financiación, y aunque el presidente Trump ha expresado su impresión de que los demócratas podrían querer un acuerdo, la parálisis legislativa mantiene en vilo a los inversionistas. Este contexto de riesgo ha desviado la atención hacia activos más seguros, impactando directamente el precio de materias primas como el oro y alterando las expectativas sobre las futuras decisiones de la Reserva Federal en materia de tasas de interés.