Este entorno ha llevado a algunos inversores y "ballenas" (grandes tenedores) a rotar parte de su capital hacia las altcoins.

Por ejemplo, un analista señaló que el token Aster podría superar a HYPE en capitalización de mercado, con un potencial de repunte del 480%, debido a que las "ballenas se decantaron claramente por ASTER y abandonaron HYPE". Sin embargo, también existen señales que sugieren un posible fin de la "temporada de altcoins", lo que indica que el mercado podría estar cerca de un retroceso. En el caso de Ethereum (ETH), la segunda criptomoneda más grande, la euforia por su precio se ha desvanecido, aunque la demanda institucional se mantiene fuerte y algunos analistas aún ven un objetivo de 5.000 dólares para fin de año. La clave para ETH sería recuperar el nivel de 4.580 dólares para desencadenar una posible ruptura alcista.