Además, la perspectiva de tasas de interés más bajas en EE. UU. es un factor que los analistas, como los de Bank of America, consideran que podría influir en las economías de América Latina, afectando las valoraciones de activos regionales. La decisión de la Fed es, por tanto, el evento más esperado, ya que podría confirmar la tendencia actual o introducir una nueva volatilidad en los mercados si el resultado difiere de las altas expectativas.