La semana comenzó con una fuerte apreciación del peso, llevando al dólar a abrir en $3.990 y alcanzar un mínimo de $3.984, un rango no visto desde julio. Acciones & Valores señaló que, a pesar de un panorama estructural desafiante, factores como la postura del Banco de la República y la apreciación de pares regionales podrían respaldar una cotización por debajo de los $4.000.
Sin embargo, esta tendencia no se sostuvo.
En la siguiente jornada, la divisa revirtió su caída, cerrando en $4.005 tras haber tocado un máximo de $4.011,90. La presión sobre el peso colombiano se atribuyó en parte a la caída de más del 2 % en los precios del petróleo. Los analistas presentaron visiones diversas: mientras Credicorp Capital anticipaba movimientos entre $4.040 y $4.000, Rodrigo Lama de Global66 mantenía una visión de mayor debilidad para el dólar hacia el último trimestre del año.
La Tasa Representativa del Mercado (TRM) se ubicó en valores como $4.016,94 y $4.002,86, reflejando la indecisión del mercado.