Otro análisis sugiere que Bitcoin debe cerrar la semana por encima de los $114.000 para evitar una corrección “fea”. La debilidad del precio se atribuye en parte a la actividad de las llamadas “ballenas” de Bitcoin, grandes tenedores de la criptomoneda, cuyos movimientos pueden generar ondas de choque en el mercado. La caída también se produjo en un contexto de preparación de los mercados para la publicación de datos económicos importantes en EE. UU., como el índice PCE, lo que demuestra la creciente correlación de las criptomonedas con los mercados financieros tradicionales.