La semana comenzó con "buen ánimo" tras datos favorables de inflación al consumidor en EE. UU., pero este optimismo fue rápidamente moderado por un dato de inflación al productor menos alentador.

Esta dualidad marcó el tono de la semana. En Colombia, mientras el índice general celebraba un récord, se observó una fuerte divergencia en el desempeño de las acciones. Un grupo de emisores impulsó el mercado al alza, pero un número importante de compañías, especialmente del sector de la construcción y conglomerados como Grupo Argos, cerraron con pérdidas significativas. Esta bifurcación evidencia la "selectividad de los inversores", quienes no están comprando el mercado de forma generalizada, sino que analizan cuidadosamente cada activo. Además, persisten "murmullos sobre peligros" en los pasillos, como la dependencia de factores externos y la necesidad de refinanciar deudas a corto plazo. Por lo tanto, el mercado celebra los logros actuales, pero se mantiene vigilante, consciente de que la sostenibilidad del rally dependerá de la evolución de múltiples variables tanto locales como internacionales.