La expectativa por el discurso del presidente de la Reserva Federal de EE. UU., Jerome Powell, dominó el sentimiento global, ya que se esperaban pistas sobre el futuro de la política monetaria.

En Asia, las bolsas tuvieron un desempeño mayoritariamente positivo, aunque con ganancias moderadas.

Tokio subió un 0,05% tras conocerse datos de inflación, mientras que Seúl avanzó un 0,86% y Shanghái un 1,4%. Por su parte, los mercados europeos abrieron ligeramente al alza, con Milán ganando un 0,44% y París un 0,12%, a pesar de datos que mostraron una contracción del PIB alemán del 0,3%, peor de lo esperado. En contraste, Wall Street había cerrado la jornada anterior con pérdidas; el Dow Jones de Industriales, el Nasdaq Composite y el S&P 500 cayeron entre un 0,34% y un 0,4%. Esta prudencia generalizada se debía a que los inversores buscaban en las palabras de Powell cualquier indicio que confirmara un posible recorte de tasas de interés en septiembre. El resultado de la sesión bursátil global dependía en gran medida de la comparecencia del presidente de la Fed, así como de las intervenciones de otras figuras clave como la presidenta del BCE, Christine Lagarde.