Cada vez más, los capitales se están diversificando hacia mercados europeos, percibidos como más estables y con marcos regulatorios más favorables.

Analistas señalan que las posibles políticas de Trump podrían generar presiones inflacionarias y afectar las tasas de interés de la Reserva Federal, reduciendo el atractivo del mercado estadounidense.

En contraste, Europa ofrece ventajas como tratados para evitar la doble tributación y seguridad jurídica.

Esta tendencia es respaldada por el desempeño de los mercados: mientras el S&P 500 registró caídas este año, el Eurostoxx 50 ha mostrado una recuperación sostenida. El debilitamiento global del dólar, influenciado por datos económicos estadounidenses poco alentadores, también ha contribuido a esta dinámica.

La migración de capitales se ve facilitada por la aparición de nuevas plataformas tecnológicas que democratizan el acceso a la inversión internacional para los colombianos. Startups como Nauta Land, que ofrece inversión fraccionada en el mercado inmobiliario de Madrid desde 100 euros, y otras como Trii o HAPI, que permiten invertir en ETFs europeos, están abriendo nuevas vías para que los inversionistas locales diversifiquen sus portafolios en monedas fuertes y mercados menos volátiles, siguiendo las recomendaciones de importantes gestores de activos como DWS, el brazo inversor de Deutsche Bank.