La iniciativa fue presentada con mensaje de urgencia y argumenta que la prohibición es necesaria para proteger los recursos hídricos, la biodiversidad y la salud de las comunidades. El texto se respalda en evidencia técnica y científica que advierte sobre los riesgos de la técnica, como la contaminación de fuentes de agua, la emisión de gases de efecto invernadero como el metano y la generación de residuos peligrosos. “Decir no al fracking es decir sí a una economía que valora la vida y la dignidad de las comunidades”, afirmó la ministra Estrada durante la radicación. El proyecto tiene ahora una mayor probabilidad de avanzar, ya que la presidencia de la Comisión Quinta de la Cámara, donde inicia su trámite, está en manos de Erick Velasco, del Pacto Histórico. El debate se da en un contexto preelectoral en el que figuras como los precandidatos Mauricio Cárdenas y Claudia López han mostrado apertura a la realización de pilotos de fracking bajo condiciones reguladas.
