Hasta ahora, las soluciones como empastes o carillas eran reparaciones artificiales que no restauraban la estructura original del diente.
Este nuevo gel, sin embargo, estimula la regeneración natural.
Su funcionamiento se basa en nanopartículas bioactivas que imitan la composición del esmalte humano. Al aplicarse sobre la superficie dental, estas partículas se integran con los minerales del diente y promueven el crecimiento de una nueva capa de esmalte. Los ensayos preliminares han demostrado que el tratamiento restaura la dureza y el brillo natural del esmalte sin causar sensibilidad ni dañar los tejidos circundantes. El proceso es no invasivo, lo que lo convierte en una opción prometedora para la prevención y el tratamiento de las caries en sus etapas iniciales. Según los investigadores, los primeros resultados son visibles después de una semana, y la regeneración se completa en dos semanas, recuperando la resistencia original del diente. Si las futuras pruebas en humanos confirman su eficacia y seguridad, este gel podría llegar al mercado en los próximos años, posiblemente en productos de uso doméstico como pastas dentales, marcando el inicio de una era de odontología más regenerativa y menos invasiva.










