Su reactivación provoca que las células tumorales sean reconocidas y atacadas por el sistema inmunitario, abriendo la puerta a nuevas terapias biológicas.

Durante décadas, grandes porciones del genoma humano que no codifican proteínas fueron calificadas como “ADN basura”, asumiendo que carecían de una función relevante.

Sin embargo, esta investigación cambia radicalmente esa percepción.

Los científicos descubrieron que la reactivación controlada de ciertas secuencias de este ADN no codificante dentro de las células cancerosas desencadena una respuesta inesperada: las células malignas comienzan a comportarse como si estuvieran infectadas por un virus. Este fenómeno, conocido como mimetismo viral, provoca que el sistema inmunitario del cuerpo las identifique como una amenaza externa y las ataque con mayor eficacia.

El hallazgo representa un cambio profundo en la comprensión del genoma y abre una nueva vía para el desarrollo de tratamientos oncológicos. En lugar de atacar directamente las células tumorales con quimioterapia, esta estrategia busca potenciar la respuesta inmunológica natural del propio paciente. Los científicos ya trabajan en el diseño de fármacos capaces de estimular de manera selectiva estas regiones del ADN, con el objetivo de convertir el tumor en un blanco visible para las defensas del organismo. Esta aproximación podría dar lugar a una nueva generación de terapias biológicas más precisas, menos invasivas y potencialmente efectivas contra diferentes tipos de tumores.