El esqueleto, hallado casi completo, incluye partes del cráneo, una columna vertebral íntegra y extremidades, lo que lo convierte en una pieza clave para entender los orígenes del linaje que dio lugar a los gigantes herbívoros. Agustín Martinelli, uno de los autores, explicó: “El *Huayracursor*... lo convierte en uno de los dinosaurios más antiguos conocidos”. Paralelamente, otro equipo de paleontólogos en la Patagonia localizó un huevo de dinosaurio de 70 millones de años en un estado de conservación extraordinario en la provincia de Chubut.

El espécimen será sometido a análisis avanzados en el Museo Paleontológico Egidio Feruglio (MEF) para determinar la especie. Estos descubrimientos no solo añaden nuevas piezas al árbol genealógico de los dinosaurios, sino que también refuerzan el papel de Argentina como una potencia global en la investigación paleontológica, destacando el potencial de regiones como los Andes para futuros hallazgos sobre la era de los dinosaurios.