Informes recientes de las firmas de ciberseguridad Fortinet y Kaspersky revelan una creciente sofisticación en los ciberataques, impulsada en gran medida por el uso de la inteligencia artificial (IA) por parte de los delincuentes. Esta tecnología les permite automatizar el reconocimiento de vulnerabilidades, crear campañas de *phishing* más convincentes y desarrollar *malware* sin necesidad de conocimientos técnicos avanzados. Según FortiGuard Labs, en la primera mitad de 2025, Colombia registró 7,1 mil millones de intentos de ciberataques, y se detectaron 36.000 escaneos automatizados por segundo a nivel global, lo que demuestra un enfoque más estratégico y menos indiscriminado por parte de los atacantes. Arturo Torres, estratega de Fortinet, explica que “los atacantes también la están aprovechando para mejorar sus operaciones”.
Herramientas como FraudGPT y WormGPT son empleadas para generar campañas de ingeniería social a gran escala. Además, los ciberdelincuentes están utilizando la IA como un gancho para distribuir *malware*, disfrazando archivos maliciosos como aplicaciones populares de IA como ChatGPT.
Kaspersky detectó un aumento del 115 % en este tipo de archivos en 2025, afectando principalmente a pequeñas y medianas empresas.
La Generación Z, a pesar de ser nativa digital, es uno de los grupos más vulnerables. Andrés Cajamarca, de Fortinet Colombia, señala que “muchos aún no saben cómo moverse de manera segura en internet”. En respuesta, la industria de la ciberseguridad también está empleando la IA como una herramienta de defensa. Fortinet utiliza IA discriminativa para detectar *malware* desconocido y GenAI para priorizar alertas, optimizando la respuesta y reduciendo la fatiga de los analistas. La magnitud de las amenazas, con miles de millones de eventos maliciosos detectados, hace imposible el análisis manual, consolidando a la IA como un recurso indispensable para la ciber resiliencia.
En resumenLa inteligencia artificial está transformando la ciberseguridad en un campo de batalla de doble filo, donde tanto atacantes como defensores la utilizan para sofisticar sus métodos. Mientras los ciberdelincuentes automatizan ataques y crean engaños más efectivos, las empresas de seguridad la emplean para detectar amenazas desconocidas y optimizar la respuesta, evidenciando que la IA es fundamental en el futuro de la protección digital.